El apogeo de “El Gringo” se remonta a mediados de la década del 2000, cuando formaba parte de la red de narcotráfico del capo puertorriqueño José David Figueroa Agosto y según las autoridades del momento, estaba vinculado al cartel del boricua como uno de los “principales cabecillas”, encargado de gestionar el lavado de activos a través de varias casas de cambio.
Otro de los señalamientos que se le hace es que coordinaba el tráfico en los barrios de la parte norte de la capital, especialmente en Capotillo. Debido a ello, la Policía Nacional le dio el mote de “rey del microtráfico en Santo Domingo”.
No fue hasta octubre del 2009 que Mesa Beltré fue detenido por primera vez por autoridades dominicanas cuando agentes del extinto programa de seguridad ciudadana “Barrio Seguro” lo apresaron en la calle Juana Saltitopa, del sector Villa María de la capital, mientras se trasladaba en un vehículo BMW en el cual se ocuparon más de cuatro millones de pesos; los reportes de la fecha señalan que al momento de su detención, el “rey del microtráfico” habría ofrecido un soborno de RD$500,000 en efectivo a cambio de que lo dejaran seguir su trayecto, oferta que fue rechazada por los agentes en operación.
Como consecuencia, las autoridades efectuaron un allanamiento en la "Casa de Cambio Solano", la cual era señalada como la sede de su operación de lavado de activos, donde se incautaron alrededor de RD$50 millones de pesos en efectivo tanto en moneda local como extranjeras, que en el momento no tenían soportes legales.
“El Gringo” tuvo que cumplir cumplió una medida de coerción de tres meses en la cárcel de Najayo bajo cargos de lavado de activos y en septiembre de 2010 fue condenado a ocho años de prisión tras ser encontrado culpable. En el 2011, su condena fue ratificada por la corte de apelación.
En ese momento, las investigaciones señalaban que Mesa Beltré poseía una fortuna en bienes muebles e inmuebles que alcanzaba los 800 millones de pesos.
En el año 2011, Mesa Beltré agredió dentro de la cárcel de Najayo al encargado de la sección de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), a quien le fracturó un brazo.
Mesa Beltré amenazó de muerte al oficial Orlando Stephan de la Rosa y a su familia. La DNCD informó en su momento que la agresión se produjo luego de una discusión en la que el recluso le exigía la devolución de un televisor que le habían incautado para fines de investigación.
Ya para el 2014, luego de que la Cámara Penal de la Corte de Apelación del Distrito Nacional dispuso la libertad condicional del entonces imputado, con vigencia por tres años, ocho meses y 15 días, el cual era justamente el tiempo restante para cumplir su pena inicial.
Segundo arresto y condena a 30 años
Las autoridades volvieron a apresar al “Gringo” apenas dos años después de su puesta en libertad condicional, al ser acusado de patrocinar una red de narcotráfico internacional que reclutaba mulas para sus actividades y días más tarde le fue dictado a un año de prisión preventiva en la cárcel La Victoria.
El ocho de mayo del 2018, el Primer Tribunal Colegiado de la provincia Santo Domingo lo condenó a 30 años de prisión y el pago de una multa de RD$5 millones tras ser encontrado culpable de “dirigir una organización criminal que se dedicaba al tráfico internacional de drogas y al lavado de activos”, luego de que las investigaciones establecieran que Beltré manejaba una organización criminal internacional que llevaba años operando desde el Aeropuerto Internacional de Las Américas.
Otra de sus vinculaciones en el mundo de las drogas fue con César Emilio Peralta, considerado como el "Pablo Escobar dominicano" por agencias internacionales.
Las autoridades dominicanas, en el año 2019, indicaron que por más 20 años “César El Abusador” estuvo involucrado en el negocio de las drogas en el país y Estados Unidos, iniciándose como miembro de las organizaciones criminales de conocidos narcotraficantes del pasado como Rolando Florián Feliz, Pascual Cordero Martínez (El Chino), Manuel Mesa Beltré (El Gringo), y Quirino Ernesto Paulino Castillo.
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