Porfirio Ferreira y María Eugenia Santana,
SANTIAGO. RD.
Las autoridades policiales de esta ciudad informaron esta mañana que profundizan las investigaciones en torno al hallazgo de una expareja de esposos encontrados calcinados ayer dentro de una vivienda del sector Brisas del Yaque, del distrito municipal Hato del Yaque, al suroeste de aquí.
Los cuerpos totalmente quemados de María Eugenia Santana, de 33 años y Porfirio Ferreira, fueron levantados por un médico legista, representantes del Ministerio Público y la Policía Nacional.
La vivienda donde fueron hallados los cadáveres se quemó totalmente, así como un carro que usaba Porfirio Ferreira en sus labores de chofer del transporte público.
De acuerdo a versiones de vecinos, la pareja llevaba varios meses separada, pero mantenían cierta comunicación, ya que estaba pendiente la venta de la vivienda donde residían y su posterior repartición de los recursos económicos.
La pareja dejó tres niños en la orfandad con diferentes edades, pero todos menores.
María Eugenia Santana trabajaba como encargada del departamento de servicio al cliente en el hospital municipal de Hato del Yaque, y fue definida por sus ex-compañeros de labores como muy servicial, atenta y afable por la manera en que trataba a todas las personas.
Moradores del sector esperan que las autoridades correspondientes esclarezcan el suceso, aunque se presume que se habría tratado de un feminicidio-suicidio.
Los cuerpos totalmente quemados de María Eugenia Santana, de 33 años y Porfirio Ferreira, fueron levantados por un médico legista, representantes del Ministerio Público y la Policía Nacional.
La vivienda donde fueron hallados los cadáveres se quemó totalmente, así como un carro que usaba Porfirio Ferreira en sus labores de chofer del transporte público.
De acuerdo a versiones de vecinos, la pareja llevaba varios meses separada, pero mantenían cierta comunicación, ya que estaba pendiente la venta de la vivienda donde residían y su posterior repartición de los recursos económicos.
La pareja dejó tres niños en la orfandad con diferentes edades, pero todos menores.
María Eugenia Santana trabajaba como encargada del departamento de servicio al cliente en el hospital municipal de Hato del Yaque, y fue definida por sus ex-compañeros de labores como muy servicial, atenta y afable por la manera en que trataba a todas las personas.
Moradores del sector esperan que las autoridades correspondientes esclarezcan el suceso, aunque se presume que se habría tratado de un feminicidio-suicidio.
0 comments :
Publicar un comentario