SANTO DOMINGO.- El comunicador Ángel Martínez fue trasladado a la Octava Sala Penal del Distrito Nacional, donde se le conoce una acción de amparo en contra del juez Deiby Timoteo Peguero, del Séptimo Juzgado de la Instrucción, quien semanas atrás le impuso medidas de coerción consistentes en una garantía económica de tres millones de pesos, impedimento de salida del país y presentación periódica.
La acción busca anular la decisión del juez Peguero, por supuesta violación a derechos fundamentales, al haberse notificado la resolución sobre la medida de coerción con un retraso que, según la defensa, vulneró el debido proceso.
A diferencia de otras ocasiones, Martínez fue conducido cabizbajo hasta la sala penal y no ofreció declaraciones a la prensa.
De acuerdo con sus abogados, se encuentra en huelga de hambre, lo que ha afectado visiblemente su estado físico. La defensa insistió en su liberación inmediata.
El conflicto judicial se enmarca en la querella presentada en su contra por la exviceministra de Medio Ambiente, Milagros De Camps Germán, quien lo imputa de haber lesionado su honra y dignidad mediante declaraciones públicas.
A raíz de esa querella, el juez Peguero impuso las medidas cautelares que hoy se buscan revertir por vía del amparo.
Paralelamente, los abogados de Martínez sometieron un recurso de habeas corpus ante la Cuarta Sala Penal del Distrito Nacional, con el propósito de lograr su liberación tras permanecer detenido desde la tarde del miércoles.
El arresto se produjo luego de que Martínez fuera acusado de cometer delitos en audiencia, al supuestamente faltar el respeto al juez Raymundo Mejía, del Primer Juzgado de la Instrucción, quien conoce otro proceso en su contra por difamación e injuria, interpuesto por la ministra de Interior y Policía, Faride Raful.
Se espera que ambas decisiones, el amparo y el habeas corpus, sean decididas en el transcurso del día o durante esta semana, mientras crece la presión pública y mediática sobre el caso.
La acción busca anular la decisión del juez Peguero, por supuesta violación a derechos fundamentales, al haberse notificado la resolución sobre la medida de coerción con un retraso que, según la defensa, vulneró el debido proceso.
A diferencia de otras ocasiones, Martínez fue conducido cabizbajo hasta la sala penal y no ofreció declaraciones a la prensa.
De acuerdo con sus abogados, se encuentra en huelga de hambre, lo que ha afectado visiblemente su estado físico. La defensa insistió en su liberación inmediata.
El conflicto judicial se enmarca en la querella presentada en su contra por la exviceministra de Medio Ambiente, Milagros De Camps Germán, quien lo imputa de haber lesionado su honra y dignidad mediante declaraciones públicas.
A raíz de esa querella, el juez Peguero impuso las medidas cautelares que hoy se buscan revertir por vía del amparo.
Paralelamente, los abogados de Martínez sometieron un recurso de habeas corpus ante la Cuarta Sala Penal del Distrito Nacional, con el propósito de lograr su liberación tras permanecer detenido desde la tarde del miércoles.
El arresto se produjo luego de que Martínez fuera acusado de cometer delitos en audiencia, al supuestamente faltar el respeto al juez Raymundo Mejía, del Primer Juzgado de la Instrucción, quien conoce otro proceso en su contra por difamación e injuria, interpuesto por la ministra de Interior y Policía, Faride Raful.
Se espera que ambas decisiones, el amparo y el habeas corpus, sean decididas en el transcurso del día o durante esta semana, mientras crece la presión pública y mediática sobre el caso.
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